Cada nueva iniciativa debe pasar por 5 procedimientos distintos como mínimo, que aseguran que se cumple con toda la normativa vigente en el país y que ofrece los mejores estándares de seguridad ante eventos como el ocurrido el 27 de febrero pasado.

Codelco incorpora medidas antisísmicas desde mucho antes de los sucesos recientes. “En la Vicepresidencia Corporativa de Proyectos tenemos desarrollados criterios de diseño sísmico,  que recopilan también los antecedentes de las últimas normas que están apareciendo en el mundo para las diferentes obras específicas, ya sean estanques, edificios industriales u otra infraestructura,” explica Alejandro Espinoza, director de Macrodisciplina Civil Estructural de la Gerencia de Ingeniería.

Cada proyecto debe tener estudios de amenaza sísmica, realizados por empresas especialistas. “Además, en el último tiempo hemos agregado un procedimiento de revisión experta sísmica; y otro de revisión experta en mecánica de suelos, porque hemos detectado que se debe abordar la interacción suelo–estructura e integrarlos en el diseño de los proyectos”.

Gracias a estos procedimientos de revisión experta en materia antisísmica, Codelco se encuentra a la vanguardia en el país y está por sobre lo que exige la normativa legal vigente en Chile.

“A raíz del último terremoto estamos muy interesados en unir el tema de la integración suelo–estructura, estamos siempre pensando en instrumentar mejor en las divisiones para poder acompañar todos estos estudios de amenaza sísmica”, resalta Alejandro Espinoza.

Todos estos procedimientos implican que si se descubre alguna falencia, primero se hace una declaración del hallazgo y la no conformidad frente al proyecto, lo que puede llevar a la paralización del mismo hasta que no se solucionen las falencias detectadas, dependiendo del riego potencial de lafalla.

“Una vez que hemos hecho cumplir la revisión experta, nosotros prácticamente estamos en condiciones de asegurar incluso que el proyecto va a garantizar que la operación no se detenga”, afirma el experto, quien agrega que “obviamente también garantizamos la vida de las personas, que es lo más importante, ya que las estructuras no van a colapsar en ningún sentido”.

Estos estudios no sólo toman en cuenta las estructuras mismas sino también la carga de los edificios, es decir, el peso de las maquinarias o elementos que estarán en su interior, que pueden llegar a pesar miles de toneladas extras. El trabajo se enfoca a todos los aspectos por lo que los procedimientos también se aplican a todo lo que se ubicará al interior de las estructuras mismas.

“El gran aprendizaje que hemos tenido con este terremoto es que el sismo lejano afectó un poco la interacción suelo-estructura, lo que afecta más a estructuras relativamente flexibles, especialmente en zonas donde el suelo es más blando. A raíz de eso, en Codelco tenemos que tener las precauciones de aquellos sistemas de soportes de equipos que pudieran estar en el rango flexible, aunque no es muy habitual, ya que las estructuras que se diseñan acá son bastante rígidas, a pesar de esto tenemos que hacer un catástro de todas nuestras estructuras más flexibles para estar bien preparados,” asegura Espinoza.

Gaby, un ejemplo exitoso

El día 14 de noviembre de 2007, a las 12:45 horas, en el entonces Proyecto Gaby se trabajaba contra el tiempo en labores de construcción y montaje cuando un terremoto de 7.7 grados Richter sacudió el norte de Chile.

En ese preciso instante, un contingente de trabajadores estaba abocado en la compleja maniobra de instalar la cúpula del apilador (stockpile) de material grueso. Una pieza de 24 toneladas que debido a su forma octogonal, exigió el trabajo conjunto de 12 grúas para elevarla y disponerla sobre una estructura de más de 40 metros de alto. La tarea se desarrollaba con absoluta normalidad cuando la tierra en Sierra Gorda empezó a temblar.

El sismo que asoló la ciudad de Tocopilla y perjudicó severamente a todo el Norte Grande, no perturbó la instalación de la cúpula. Ésta se encontraba correctamente enlazada a las grúas, que soportaron sin problemas el movimiento telúrico.

Esta adecuada planificación, diseño y ejecución de un proyecto permitió que el sismo de 2007 no provocará ningún problema, a pesar de la delicada y complicada maniobra que se estaba llevando a cabo.