En conjunto con el municipio de Requínoa, la empresa EPSUR y vecinos, comenzó el retiro de más de 36 mil toneladas de escombros depositados en el lecho del río Cachapoal.
Lo que podría ser un paisaje paradisíaco se ha convertido en un lamentable espectáculo. Quienes circulan por la ruta Colinas Verdes, tristemente se han percatado que el lugar se ha transformado en un basural. Según cálculos de la municipalidad de Requínoa, en 7 hectáreas de terreno entre la ruta y el río Cachapoal, hay 36 mil toneladas de escombros y desechos de todo tipo.
La Directora de Medioambiente del municipio, Alejandra Silva, aseguró que -pese a constantes fiscalizaciones- personas de varias comunas de la región e incluso de la Región Metropolitana han sido sorprendidas depositando desechos en el lugar.
"Tristemente se dan el dato de que aquí pueden botar sus escombros en forma clandestina y ahorrarse el costo económico que significa hacerlo en los lugares autorizados", lamentó.
Por eso División El Teniente, a través del área territorial de la Gerencia de Sustentabilidad, en conjunto con el municipio de Requínoa y la empresa EPSUR dieron el primer paso cerrando un acceso al lecho del río y colocando un letrero de advertencia en el lugar donde se enfoca la mayor cantidad de vertimiento de desechos.
Según el director de Medioambiente de la División, Luis Concha, este problema se arrastra por varios años y pasa principalmente por la falta de conciencia de muchas personas en materias ambientales, quienes prefieren botar los desechos en estos sectores naturales y no llevarlos a los lugares autorizados.
"Lo importante es que Codelco finalmente agrupó a varios actores y pudimos articular el proceso de inicio de la eliminación de este basural clandestino. Este es un proceso bastante largo, del que recién estamos colocando la primera piedra y tenemos esperanza de que nos vaya bien, pero requiere de un esfuerzo y seguimiento permanente de los compromisos asumidos", adelantó.
Junto al cierre de los accesos y la colocación de letrero de advertencia, comenzó el saneamiento del terreno con el retiro de varias camionadas de desechos los que fueron llevados a un lugar de acopio autorizado a cargo de la empresa EPSUR.
Vecinos vigilantes
Elías Valenzuela, vecino:
"Luego de esta limpieza les digo a los que vienen a botar basura que no lo hagan más, porque estaré vigilando y los voy a denunciar. Voy a cuidar el portón y a los que insistan les voy a sacar una foto de la patente para denunciarlos. Que la gente comience a cambiar y bote la basura donde debe botarla".
Daniel Salazar, gerente empresa EPSUR:
"La idea es no encontrarse más con esto. Que se tome conciencia de que existen alternativas y lugares donde se pueden disponer este tipo de residuos de manera segura y amigable con el medioambiente".