El gobierno ha suscrito una serie de acuerdos con sectores productivos para promover mejoras en la productividad y competitividad, en las prácticas de producción limpia y la prevención de la contaminación.
En noviembre de 2000, el Ministerio de Minería, los servicios públicos con competencia ambiental y la gran minería chilena a través del Consejo Minero, del que Codelco forma parte, firmaron el Acuerdo Marco de Producción Limpia para el sector de la gran minería.
Este Acuerdo supuso dos años de trabajo conjunto entre Codelco, los otros socios del Consejo Minero y el gobierno, en áreas como manejo y control de aguas ácidas, manejo de residuos líquidos y sólidos, uso eficiente de los recursos agua y energía y procedimientos para planes de cierre de faenas mineras.
Codelco, en particular, tuvo una participación muy activa, liderando el grupo de trabajo sobre uso eficiente de la energía. Entre los resultados concretos de este trabajo, que finalizó en octubre de 2002, son los Manuales de buenas prácticas en RILes, RISes y uso eficiente de agua y energía, un Manual conceptual para aguas ácidas y una Guía metodológica para planes de cierre.
"Estos instrumentos permitirán a Codelco y a las demás empresas mineras impulsar una gestión ambiental acorde con los marcos que establece el desarrollo sustentable; y a los organismos públicos contar con información técnica relevante que facilitará su labor de fiscalización", explica Soledad Robres, profesional ambiental de la Corporación.
Codelco está alineado en preservar y consolidar las alianzas logradas y, eventualmente, convenir acuerdos voluntarios de producción limpia entre las empresas del Consejo Minero que lo deseen y los organismos públicos competentes. Estos acuerdos abarcarán las materias que se estime sean de relevancia, teniendo en consideración tanto los aspectos técnicos como los económicos de las empresas y los instrumentos de fomento que a la fecha se encuentren disponibles.
En el caso de Codelco, se destaca que se han suscrito o están en preparación acuerdos ambientales, como resultado de las mesas de trabajo en las divisiones de la Corporación.
En esta línea, en septiembre de 2001 se firmó el primer acuerdo ambiental voluntario del país entre la división El Teniente, autoridades regionales (Conama e Intendencia VI Región); entidades fiscalizadoras (SAG y Servicio de Salud O'Higgins), para buscar soluciones graduales a problemas ambientales históricos.