Alrededor de 140 kilómetros separan la localidad de Gultro, en la comuna de Olivar, con la comuna de Pumanque. Aún así, eso no fue impedimento para que un grupo de vecinos y vecinas gultrinos, de la Población 10 de agosto, fueran a conocer la experiencia de la agrupación de mujeres campesinas “Mujer, Tierra y Humus” en la provincia de Colchagua, como un ejemplo de producción asociativa. 

La visita se enmarca en el Programa de Educación Ambiental del Agua, impulsado por Codelco División El Teniente y la Junta de Vigilancia del Río Cachapoal Primera Sección y sus Afluentes, y fue guiada por una monitora de la Municipalidad de Pumanque, con quien se trasladaron hasta el sector Rincón La Mina para conocer a estas mujeres emprendedoras, quienes les explicaron sobre los nichos de la lombricultura y conocieron de forma práctica el proceso, funcionamiento y materiales que utilizan para la recolección del humus de lombriz a partir de guano de caballo.

La experiencia buscó que las y los vecinos de Gultro pudieran experimentar las buenas prácticas de la asociación, con miras a replicar experiencias útiles para su invernadero comunitario.

Carlos Vásquez, supervisor de Desarrollo Comunitario de Codelco División El Teniente, plantea que “esta es una actividad enriquecedora para nuestros vecinos de Olivar, quienes han demostrado mucho interés por su proyecto de invernadero comunitario. Con este tipo de actividades, conocen otras experiencias y generan aprendizajes. Además, nos enmarca a nosotros, como División, en el apoyo a generar valor ambiental en nuestras comunidades”.  

Vanessa Mancisidor, coordinadora del Programa de Educación Ambiental del Agua, complementa que “uno de los desafíos importantes que tuvimos fue la sostenibilidad y la asociatividad, que los vecinos y vecinas logren hacerse parte de este proyecto, que trabajen en conjunto”.

En esa línea, Mancisidor indica que “este es un apoyo para acompañarlos en este proceso, ya que al conocer experiencias exitosas de otras comunidades y sus logros, pueden comprender que ellos, en conjunto como vecinos y vecinas, pueden llegar a ser y avanzar hacia acciones que les reporten beneficios para sus vidas. Lo más importante es que lo puedan sostener en el tiempo”.

Mantenerse unidos

Amalia Sánchez, de la agrupación “Mujer, Tierra y Humus”, fue clara al señalar que el éxito de las iniciativas está en “la voluntad y el interés de las personas” y llamó a los vecinos de la Población 10 de agosto a “que sigan adelante y entiendan que hay que mantenerse unidos, que si hay diferencias, se conversan, se aceptan las opiniones y diferencias, pero siempre hay que remar para un mismo lado, con un objetivo común”. 

Ángela Lizana, también de la asociación de mujeres campesinas, destaca el beneficio mutuo de estas actividades: “Es fantástico porque nosotras también nos damos a conocer, entregamos nuestros conocimientos para que organizaciones de otras comunas se animen a trabajar juntos, conocer el mundo de la lombricultura y la importancia de contar con el apoyo de instituciones”.

Gultrinos y gultrinas se mostraron agradecidos por la visita. “Me pareció muy bonita, educativa y con todos mis compañeros hemos aprendido mucho. Había cosas que no sabíamos sobre las lombrices, su uso y nos llevamos ese conocimiento para implementarlo en casa y en el invernadero”, sostiene Ana Navarro. 

María Eugenia Zúñiga, secundó el punto: “Me pareció muy entretenido. Nunca imaginé lo que podía hacerse con el guano de caballo y las lombrices, los beneficios que eso tiene y aprender, además, que podemos hacer esto mismo en casa”.