Con el entusiasta trabajo de 250 estudiantes de diez colegios de Calama, junto con los apoderados y profesores, Codelco ha logrado que el proyecto Viveros Escolares sea un éxito en la búsqueda de mantener y mejorar el Oasis de altura.
División Chuquicamata, a través del Programa Agrícola, lleva adelante desde junio del año pasado el proyecto viveros escolares, en el que las nuevas generaciones aprenden a valorar a los árboles como un componente importante del paisaje de su ciudad, buscando al mismo tiempo vivir en un lugar más limpio a través del manejo adecuado de las basuras y de los materiales que se pueden reciclar.
Los niños de edad preescolar y escolar aprenden a producir compost con desechos orgánicos de las casas de los alumnos o del propio centro escolar, en centros de reciclaje de material orgánico construidos en las escuelas. Aplican técnicas que permiten darle a estos materiales el valor de un sustrato adecuado para producir plantas.
Por otra parte, se construyó ocho invernaderos con capacidad para producir 5 mil plantas cada uno, potenciando además el trabajo ya realizado en dos colegios en los que existía la infraestructura. Allí aprenden los procesos de siembra, crecimiento, cuidados, necesidades de los árboles. En la etapa de siembra, los árboles se plantan en envases plásticos de bebidas no retornables, lo que contribuye a reutilizar elementos que no son biodegradables.
Los niños y jóvenes asisten a talleres de educación ambiental, donde reciben charlas sobre la mejor manera de utilizar el agua en una zona donde este es un elemento escaso y muy preciado; a fomentar el reciclaje de materiales y el manejo de la basura, en un marco de respeto por el medio ambiente.
El entusiasmo de los niños por las plantas va más allá del trabajo en el vivero, ya que han logrado involucrar a sus padres en sus casas para aplicar lo aprendido. Para septiembre de este año, se realizará una plantación masiva de arboles, en el que los niños y jóvenes incentivarán a la comunidad a regarlos y cuidarlos.