A sus 29 años, cuenta con casi 11 de experiencia en minería operando maquinaria pesada en un mundo tradicionalmente masculino.
Al terminar su etapa escolar, y con tan sólo 18 años, Juanita Alfaro vio la oportunidad de postular a Minera Esperanza, para un entrenamiento en conducción y manejo de camiones y equipos pesados, por lo que no lo dudo y logró quedar en ese trabajo.
Estuvo cerca de tres años ahí operando camiones y el aljibe, hasta que se abrió un proceso para ingresar a las operaciones de Ministro Hales de Codelco, postuló y fue aceptada.
"Llevó siente años en Codelco y estoy muy bien, he podido desarrollarme y trabajar con distintos equipos", relata.
Actualmente, opera cinco máquinas distintas en la división, entre las que destacan los aljibes, el cargador frontal, las motoniveladoras y los camiones.
"Como soy multifuncional, opero varios equipos y puedo desempeñar distintas funciones según el trabajo que se me encargue", cuenta sobre su experiencia con los gigantes mineros.
Su rutina diaria varía según la maquinaria que le corresponda en cada jornada, pero sus funciones pueden ser trasladar material, mojar los caminos para evitar el levantamiento de polvo, la mantención y arreglo de los caminos, el levantamiento de pretiles, entre otros.
"Todo mi trabajo es para que los compañeros puedan estar bien y hacer bien su pega, ya que acá todos trabajamos en equipo siempre", señala Juanita Alfaro.
Para la operadora de maquinaria pesada, la seguridad es fundamental para poder trabajar en equipo, por lo que sus labores no comienzan hasta que no revisa exhaustivamente todos los factores y elementos que influyen en su trabajo.
Lo primero es examinar todo el equipo y hacer lo que se conoce como "la vuelta del perro", es decir, verificar que la máquina a operar se encuentre en óptimas condiciones, todo esto manteniendo siempre tres puntos de apoyo o contacto entre el operario y la máquina. Terminada esta verificación, y cada vez que se mueva el equipo, es importante revisar que no existan elementos adelante o atrás que puedan afectar el correcto desplazamiento.
"La seguridad es lo más importante para nosotros. En Codelco nos preocupamos mucho de ese tema. La seguridad es lo primero y no podemos descuidarnos nunca. Nosotros trabajamos de día y de noche, por lo que también es muy importante poder dormir y descansar bien, eso es fundamental para nuestra seguridad y la de los compañeros", destaca Juanita.
De todas sus funciones en la mina, la trabajadora reconoce que su favorita es operar los camiones. "Uno puede estar más tranquilo en la cabina, me gusta eso. Igual existen sus riesgos, pero con la seguridad que tenemos acá y estando siempre pendiente de todas las condiciones no hay mayores problemas".
Juanita Alfaro asegura que está contenta de desempeñarse en este rubro que tradicionalmente ha sido masculino. "Llevo 10 años en minería, voy a cumplir los 11, y espero seguir mucho tiempo más acá", afirma.