Las caídas desde distinto nivel representan la segunda causa de accidentes laborales fatales en nuestro país, motivo por el que Radomiro Tomic -en su Programa de Seguridad en Protección de Caídas- intensificó la prevención ante estos acontecimientos, realizando el curso de Inspección de Equipos para Trabajo en Altura, iniciativa que certifica a la supervisión en prevención de riesgos de dotación propia y contratista.

Christopher Curtis, especialista Técnico de Protección de Caídas de la empresa 3M Chile, fue el encargado de dar el puntapié inicial en este curso, explicando que el objetivo principal de esta actividad es enseñar normativas vigentes en la materia y “cómo configuro de manera correcta los equipos y dar una certificación a la gente propia y contratistas, para inspeccionar sus propios equipos y que adquieran la habilidad y capacidad de poder dar de baja equipos que no estén cumpliendo con los estándares mínimos de certificación dentro de la división”.

Esta iniciativa del Programa de Seguridad en Protección de Caídas apunta hacia la elaboración de un estándar divisional para la protección en el trabajo en altura, que permita garantizar la seguridad de todas las trabajadoras y trabajadores que desempeñan estas labores, aportando al fortalecimiento de la cultura preventiva y a la continuidad operacional.

Actualizar conocimientos y ponerlos en práctica

Esta capacitación, que tuvo una duración de 4 horas, tiene como requisito previo la realización del curso Persona Competente en Trabajo en Altura, de 16 horas y se basa -principalmente- en la actualización de normativas internacionales, nacionales y en el ECF N°2. 

Para Susana Cruz, ingeniera en Prevención de Riesgos de la empresa colaboradora Schwager, “la idea es seguir aprendiendo y qué mejor que hacer las inspecciones que pide la Guía Técnica cada 6 meses y que cada empresa pueda verificar el estado de los equipos de protección contra caída y, a la vez, sacar lo que esté fuera de estándar”.

Así, Radomiro Tomic sigue avanzando para garantizar la seguridad y salud ocupacional de todos los trabajadores y trabajadoras, como lo establece el Mapa Estratégico, fortaleciendo al mismo tiempo el valor compartido de una relación sustentada en el respeto, la innovación y la calidad de vida laboral.