La iniciativa partió con dos pilotos por cada área operativa, logrando estandarizar los procesos y con ello mejorar la calidad de la información para la toma de decisiones
Mejorar los tiempos de respuesta, saber cuáles son las fallas más recurrentes de los equipos y contar con la información de manera transversal y disponible para quienes la requieran, a nivel divisional o corporativo, son algunos de los objetivos que la Dirección de Ingeniería de Mantenimiento (DIM) de Chuquicamata se propuso al desarrollar el proyecto piloto SAP-PM.
Esta iniciativa se enmarca en la búsqueda de la excelencia que lidera la Gerencia de Operaciones, para lo que se requiere tener datos concretos, confiables y estandarizados de los activos físicos, que permitan mejorar su gestión y optimizar su uso mientras están en funcionamiento.
Implementación
“Garantizar la confianza en los registros y datos es algo que se intentó por años, pero sin resultados satisfactorios. Para lograrlo se optó por abordar la iniciativa centrando el esfuerzo en equipos específicos y no con la totalidad del inventario. Procediendo así se asegura la consolidación de la práctica para continuar con el roll out de la iniciativa, esto es, ir expandiéndola hacia los restantes equipos”, explicó Jonny Clouet, uno de los profesionales de la DIM que participa de la iniciativa.
El punto de partida se inició con las gerencias Fundición, Mina, Refinería, Concentradora, Extracción y Lixiviación (GEL) y Servicios y Suministros (GSS), donde se implementaron dos pilotos por área – identificando equipos críticos - para regularizar el uso del sistema de mantenimiento, a excepción de la GSS que trabajó de manera transversal sólo con uno.
“La ventaja de estos pilotos SAP-PM es el involucramiento de toda la organización, desde el gerente hasta los trabajadores propios y colaboradores, para la implementación del ciclo de mantenimiento. Además cualquier persona que tenga acceso al sistema podrá observar los registros, por ejemplo, para ver cuántas veces ha fallado una pala, los recursos utilizados en los chancadores o costos de mantenimiento de los molinos”, enfatizó César Carrasco, consultor senior de la empresa SPM que colaboró en el proyecto.
Recibimiento en las áreas
Uno de los propósitos de esta iniciativa es potenciar el estándar que existe en Chuquicamata. Los trabajadores que participaron en el piloto mostraron su entusiasmo, tanto por mejorar el estado del ciclo de mantenimiento, como también por aprender nuevas competencias.
Uno de los pilotos seleccionados fue la línea SAG 16 de la Concentradora, que según explicó Jonathan Araya, ingeniero de Planificación de Mantenimiento y encargado de liderar el proyecto en su área, el proceso fue muy provechoso y destacó especialmente el compromiso de los trabajadores. “Tuvimos que normalizar los perfiles SAP y capacitar a las personas que no tenían conocimiento de cómo funciona este sistema. Por otra parte, cada área tiene distintas formas de trabajar y eso lo debimos estandarizar, pero claramente mejoraremos la gestión del mantenimiento con este proyecto. El desafío que queda es potenciar las competencias de nuestro personal bajo este proceso, quienes ya han demostrado el compromiso por conseguirlo”, comentó el supervisor.
El programa partió en julio de 2016, culminó en octubre y luego pasó por un periodo de consolidación y evaluación en noviembre. Actualmente la DIM continúa potenciando estas áreas y preparando otras para que el 2017 comiencen a operar bajo este proceso.