En Chuquicamata continúan los talleres de sociocuidado, iniciativa que busca generar un espacio formativo para sensibilizar y reflexionar sobre la importancia del compañerismo entre las y los trabajadores.

El objetivo ha sido difundir esta actividad a cerca de 4 mil 600 personas, en base al respeto a la vida para así construir un clima laboral donde se puedan cuidar y proteger entre las y los integrantes de la división.

Carlos Alfaro, relator de este curso, señaló que este taller tiene un carácter valórico que apela a la conciencia: “En base a preguntas, a un juego que busca llegar al sentido común, a la voluntad y a la sensatez para enfrentar el mundo del trabajo. De la adversidad, de los riesgos, basándose en una mirada y pensamiento que pase de lo personal hacia un cuidado social, grupal. El concepto es Yo me cuido, tú te cuidas, todos nos cuidamos”.

Autocuidado

Analizar en profundidad las consecuencias de un accidente y con ello dimensionar la otra cara de un evento que ocasiona lesiones en una persona, no sólo afecta la relación familiar, sino también el ambiente laboral de los compañeros más cercanos.

Así lo entendió Hernán Ortiz, operador de equipo de movimiento externo en la Refinería. “Han dado pautas súper buenas que se pueden aplicar en el trabajo y en el hogar. El autocuidado es lo principal junto a las experiencias de vida que se viven en la división”, explicó.

Por otro lado, Juan Patricio Cabrera, electromecánico especialista del área Garaje Diésel, mencionó que con la prevención nunca se deja de aprender. “El curso ha sido muy bueno, instructivo con conocimientos que uno no tenía idea o los pasamos por alto. Nos hace un recordatorio de toda la parte de seguridad y diversidad. Esto lo podemos aplicar en las conversaciones con los compañeros de trabajo, dándoles a conocer de qué se trata el curso y a la jefatura para que ellos también se integren”. 

Estos talleres de sociocuidado son una continuidad del proceso formativo que han recibido los trabajadores y trabajadoras de la división, quienes comenzaron con el taller la Voz del Semáforo para implantar el autocuidado y así difundirlo entre trabajadoras y compañeros.