Aprender a comercializar y valorar el trabajo patrimonial que realizan en cada una de sus piezas, fue el objetivo del programa “Oportunidades de desarrollo comercial de artesanía local en Alto Loa y Atacama la Grande”. Se trata de una capacitación que benefició a treinta artesanas y artesanos de Calama y Socaire, quienes  podrán sacar un mayor provecho comercial al oficio que se dedican. 

Como una forma de mostrar su arte y poner en práctica lo que aprendieron, el grupo de beneficiarios montó una muestra de artesanía a un constado de la plaza en San Pedro de Atacama, entorno natural privilegiado en el que -por primera vez- aplicaron esta nueva forma de vender sus productos. “Antes yo vendía y no anotaba, pensaba que todo era ingreso, pero no sacaba el costo de materiales ni el tiempo que demoraba en trabajar. Ahora cobro lo que tengo que cobrar y comencé a valorarme más”, comentó María Magdalena Rodríguez, tejedora calameña que participó en la muestra

Si bien la gestión comercial fue un punto central dentro de esta capacitación, el curso abordó otros aspectos relevantes. "La valoración patrimonial y el apoyo para difundir la cosmovisión de nuestros pueblos originarios, son parte relevante de la gestión comunitaria que impulsamos como Distrito Norte y por eso lo trabajamos muy de la mano con sus representantes. Con este programa quisimos apoyar el desarrollo de las artesanas y artesanos y reforzar un trabajo de acercamiento que forma parte de los lineamientos de nuestro Plan Maestro de Sustentabilidad", destacó Claudio Flores, gerente de Asuntos Comunitarios y Sustentabilidad del Distrito Norte.

Josefina Berliner, directora ejecutiva de Fundación Artesanías de Chile, agregó que “tenemos la certeza de que nuestro patrimonio cultural debe ser visto por ojos de todas las chilenas y chilenos y por las y los turistas que nos visitan. Las herramientas que se entregaron en gestión comercial permitirán comercializar de mejor manera sus productos, considerando los costos, llevando un registro de ventas y que se entusiasmen en participar en ferias a lo largo de todo el país”.

Valoran emprendimiento

La confección de cada obra de artesanía, requiere de tiempo y materia prima noble. Por eso, durante el cierre del programa en San Pedro de Atacama, las artesanas y artesanos se mostraron orgullosos de mostrar sus productos.

Elena Tito, alfarera de la comunidad de Río Grande mencionó que, “aprendimos cosas que no imaginamos y que son muy útiles para seguir en este camino que difunde nuestras raíces, el legado que adquirimos, en mi caso, lo recibí de mi abuela y ella me enseñó a hacer siempre lo mejor posible y con esto uno valora ese conocimiento, las etapas de todo el proceso para obtener la creación final”.

Jorge Zuleta, artesano de Toconao hace lámparas de sal y al participar de la capacitación expresó: “Saber comercializar el trabajo que hacemos me ha servido para ordenarme, hacer el registro de lo que se hace, no se hace, se vende o no se vende, sacar el IVA, peso neto y bruto. Son cosas que se facilitarán a medida que practique y estoy muy agradecido de la oportunidad porque significa un crecimiento para nuestro emprendimiento”.