El ministro de Energía, Marcelo Tokman, junto con el Presidente Ejecutivo de Codelco, José Pablo Arellano, conocieron el desarrollo del Proyecto Biodiesel, que contempla la utilización de un combustible alternativo menos contaminante en las operaciones de Andina. “Codelco ya tiene resultados auspiciosos, por lo que estamos a la espera de las últimas pruebas, para en el futuro estudiar la posibilidad de utilizar el biodiesel en otras faenas”, dijo el ministro.

Los Andes, 7 de febrero de 2008.- El ministro de Energía, Marcelo Tokman, y el Presidente Ejecutivo de Codelco, José Pablo Arellano, visitaron el pasado miércoles 6 de febrero la mina subterránea de División Andina para observar en terreno el estado de avance del proyecto corporativo de Biodiesel, que busca mejorar las condiciones ambientales dentro de la faena y beneficiar a más de 2500 trabajadores que se desempeñan en ella. :

En la medida que seamos capaces de reemplazar los combustibles tradicionales por los biocombustibles vamos a estar haciendo un aporte al país y a la calidad de vida de nuestros trabajadores, debido a sus bajas emisiones”, señaló, José Pablo Arellano, Presidente Ejecutivo de Codelco, durante el recorrido por la mina subterránea de Andina.

El biodiesel es un combustible líquido que se elabora a partir de aceites vegetales nuevos (como raps, girasoles, soya, maní, palma, entre otros), aceites vegetales usados o grasas animales, mediante un proceso químico llamado transesterificación (en que se aplica metanol).

Puede utilizarse en estado puro, o mezclado con el diesel mineral en diferentes proporciones o como aditivo (cuando la cantidad es igual o inferior a un 5% de la mezcla). El uso de biodiesel logra disminuir hasta en un 44 % la emisión de material particulado al ambiente, cifra que sube 80% cuando se incluyen convertidores catalíticos.

La iniciativa, que lleva cuatro años de preparación en División Andina, ya aprobó los testeos de campo realizados desde 2006 y demostraron que el funcionamiento de los equipos no se ve alterado por el uso de este nuevo componente y que mejoran las condiciones ambientales al interior de la mina, resultados respaldados por el Departamento de Ingeniería Mecánica (DIM) de la Universidad de Santiago de Chile.

En el proyecto participa un equipo multidisciplinario compuesto por representantes de la administración superior, ingenieros divisionales, trabajadores, miembros del Comité Paritario de Higiene y Seguridad, dirigentes sindicales y especialistas en salud ocupacional e higiene industrial.

Actualmente, el biodiesel enfrenta el gran desafío de probar su factibilidad económica, considerando que su costo es mayor que el del petróleo. Por ello, se probará, durante un año, en una flota de 10 palas LHD de producción al interior de la Mina Subterránea para evaluar externalidades positivas producto del uso del biodiesel que cubran el diferencial de precio que existe entre el diesel y el biodiesel.

Finalmente, el ministro Tokman señaló que el desarrollo de los biocombustubles es una gran oportunidad para Chile. “Nuestro país importa el 98% del petróleo que produce. De ahí que el poder incorporar una parte de biocombustible de generación nacional, podría permitirnos reducir la exposición a las fluctuaciones de los precios y las vulnerabilidades de los mercados internacionales”.