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Venta de Bonos de Carbono: Un incentivo para la eficiencia energética

Dirección de Comunicaciones.

 

Codelco fue aprobada para comercializar sus reducciones de emisiones de gases con efecto invernadero o “bonos de carbono”. Sólo falta su verificación con la Bolsa Chicago Climate Exchange, para que se transforme en la primera minera chilena en emitirlos.


A raíz de la creciente preocupación sobre los impactos que tendrá el calentamiento global en el planeta, cabe recordar que Codelco ha invertido desde 1990 en la adecuación de sus instalaciones con el fin de reducir sus emisiones de gases contaminantes. Estas inversiones permitieron una efectiva disminución, especialmente en las emisiones de las fundiciones, además de controlar los residuos líquidos y sólidos, para, de este modo ajustarse a la legislación ambiental chilena.

Prosiguiendo en esta línea, el 2003 la empresa decidió cambiar el tipo de combustible en dos de sus cuatro fundiciones. Chuquicamata y Caletones suplieron el petróleo por gas natural, logrando reducir las emisiones de gases con efecto invernadero, especialmente dióxido de carbono (CO2). Además, en 2005 se creó en Codelco la Dirección de Eficiencia Energética y Nuevos Productos, con el propósito, entre otros, de impulsar proyectos que integren la eficiencia energética en sus criterios de diseño, de manera de disminuir las emisiones de Gases con Efecto Invernadero (GEI), aportando a la mitigación de los impactos del cambio climático en el ecosistema.

“El impulso de estos proyectos de reducción se pretende realizar a través de la obtención de compensaciones económicas que se obtendrían por la venta de derechos de emisión o ‘Bonos de Carbono’ que se producen al hacer un uso eficiente de energía”, explica Richard Aylwin, director corporativo de Eficiencia Energética de Codelco.

En efecto, la Corporación ha dejado de emitir 220 mil toneladas de dióxido de carbono en estos cuatro años (2003 – 2006), gracias al cambio de combustible en las fundiciones señaladas.

“Esta importante reducción significó para Codelco aprovechar el valor económico generado a través de la transacción de dichos bonos. Para esto, se estudiaron una serie de mercados y se optó por el Chicago Climate Exchange (CCX) en Estados Unidos”, explica Aylwin. Hace menos de un mes, dicho mercado, aprobó la comercialización de reducciones de emisiones generadas desde el año 2003 (en que comenzó la reducción de gases en Codelco Norte y Caletones).

Cuando descontaminar se convierte en beneficio

Actualmente, CCX valoriza la tonelada de dióxido de carbono en un promedio de tres dólares, por lo que Codelco podría obtener un monto de US $ 1,3 millón por el total de reducciones verificadas de emisiones desde 2003 hasta 2012. Esto gracias a que la bolsa permite contabilizar la reducción en forma retroactiva y se estima que en la Corporación ha habido una reducción de 55 mil toneladas anuales..

“Aunque CCX ya aceptó la propuesta de valorizar los bonos, aún se espera que un auditor externo contratado para tal efecto venga a verificar la reducción efectiva de emisiones”, informa el ejecutivo. De ser positiva la resolución, Codelco podría transar los bonos en abril o bien reservarlos para transarlos más adelante.

Aylwin añade que “Codelco valorizará su reducción de emisiones entre los años 2003 y 2006 de una sola vez; es decir, a través de una sola verificación, y a partir de este año lo hará de forma anual”.

Para Codelco, la verificación de un proyecto de reducción en la emisión de gases con efecto invernadero constituye un doble incentivo, ya que, además de aportarle un beneficio económico, se incentiva el desarrollo de procesos de producción más limpios”, señala el director corporativo de Eficiencia Energética. De los 300 proyectos registrados a nivel mundial de Bonos de Carbono, 13 provienen de Chile, por lo que, de concretarse esta iniciativa, Codelco se transformaría en la primera cuprífera chilena en comercializarlos.

Chicago Climate Exchange

Esta Bolsa, creada en Estados Unidos el año 2003, es un sistema comercial para los seis Gases de Efecto Invernadero (GEI), a través del cual las empresas –particularmente las privadas- hacen un compromiso voluntario, pero con fuerza legal, de reducir sus emisiones.

Estas entidades pueden lograr el cumplimiento de sus compromisos mediante reducciones internas, la adquisición de derechos de emisión de otras compañías que tienen limitación de sus emisiones o la adquisición de créditos de proyectos de Reducción de Emisiones que cumplen determinados criterios.

El sistema está destinado a tener un enfoque más global que regional e incluye fuentes de emisión y proyectos de reducción de GEI provenientes de Canadá, México, Brasil, Perú, Chile y el resto del mundo.