Un atentado que provocó el descarrilamiento de una locomotora y siete carros sufrió el convoy de la empresa Fepasa que transportaba concentrado de cobre de División Andina.

El Gerente General de División Andina, Daniel Trivelli, señaló que este tipo de atentados no sólo afectan el normal desempeño de la División Andina, sino también ponen en riesgo a la totalidad de la población. En este caso en particular, señaló que “se ha provocado un incidente ambiental –afortunadamente sin mayores consecuencias- y un riesgo evidente que atenta contra la vida, tanto de los operadores de las máquinas como a la población”. 

El hecho ocurrió cerca de las 1:30 horas de la madrugada en el sector de San Rafael, en las afueras de la ciudad de Los Andes, luego que encapuchados apedrearan la locomotora. Fue en ese momento cuando, por la extracción de piezas de sujeción de las líneas, el convoy descarriló. Producto de lo anterior, se produjo un derrame de cerca de 500 kilos de concentrado de cobre en un canal de regadío, afortunadamente sin agua. 

El convoy y la línea férrea sufrieron cuantiosos daños que están siendo evaluados por la empresa Fepasa. En el lugar se constituyó la fiscalía, carabineros y la policía de investigaciones, así como ejecutivos de Fepasa y división Andina. 

Este atentado es uno más de una serie de intentos que ha sufrido el convoy de transporte de concentrado de cobre en su trayecto entre Saladillo y el puerto de ventanas, donde se han constatado diversas acciones tendientes a generar un incidente mayor, además del constante apedreo a las máquinas y amedrentamiento del personal de la empresa ferroviaria. 

Daniel Trivelli, gerente general de División Andina condenó enérgicamente el atentado del día de hoy, indicando que hechos de esta naturaleza criminal sin duda deslegitiman cualquier reivindicación laboral.