A lo largo de siete kilómetros, en el borde del tranque de Talabre, se concentran los trabajos de recuperación de sitios arqueológicos, iniciativa impulsada por Codelco Norte. Así lo dio a conocer el Jefe del Departamento de Gestión Ambiental de la División, Rubén Pedreros, quien destacó la preocupación de la empresa por contar no sólo con el apoyo de un grupo de especialistas, sino que también con la participación en las faenas de pobladores de Chiu-Chiu.

En una primera etapa, se determinaron la existencia de alrededor de 17 sitios. Se trata de restos de un taller donde pueblos originarios elaboraban puntas de lanzas, mediante el trabajo en piedra. “Los arqueólogos ya retiraron cajas de material, que en su conjunto suman aproximadamente 9 metros cúbicos, los que luego serán dispuestos en museos determinados por la autoridad competente“, aclaró el profesional. 

En la actualidad, son 25 los arqueólogos que trabajan en terreno, acompañados de 20 lugareños que fueron incorporados a este proceso de rescate. “Cuando licitamos el servicio, incluimos en las bases la obligatoriedad de contratar mano de obra local, como una manera de hacerlos partícipes de esta iniciativa que tiene que ver con su historia. La idea también fue brindarles mayor seguridad en cuanto los objetivos que perseguimos; es decir, respetar y recuperar los sitios de interés arqueológico”, argumentó Pedreros. 

Los trabajos comenzaron luego de los estudios de impacto ambiental realizados por la División, a propósito de requerir elevar los muros del Tranque Talabre, debido a los proyectos de expansión y a la necesidad de prolongar su vida útil. 

El objetivo de estos trabajos, más allá de los elementos que se encuentren, es cumplir con las políticas y compromisos corporativos de respeto al entorno, tradiciones, historia y cultura de los pueblos originarios.