“Estas mujeres, muchas de ellas son jefas de hogar y muchas de ellas tienen sus hijos en un hogar de menores, algunas tienen su esposo preso, otras han trabajado como temporeras. La Iglesia las ha unido y ha tomado la iniciativa que tiene relación con su desarrollo y su dignidad“, señaló monseñor Cristián Contreras, obispo de San Felipe, al inaugurar ayer el Centro de Helicicultura Caracolas, en Villa La Gloria de Los Andes, V Región.

Gracias al financiamiento de Fondo de Inversión Social de Codelco, 13 mujeres de la V Región harán realidad su sueño de ser microempresarias de productos derivados de la crianza y comercialización de caracoles. 

Durante su intervención, José Pablo Arellano, Presidente Ejecutivo de Codelco, señaló que “este centro simboliza y es una muestra de cómo podemos contribuir en una iniciativa que refleja bien un espíritu de país. Esa es nuestra tarea como Codelco, contribuir al engrandecimiento de nuestro país, y es un muestra de cómo la Iglesia, el Municipio, el Gobierno Regional, nosotros como empresa, otras empresas privadas, todas hemos sumado esfuerzos para generar oportunidades que mejoran la calidad de vida de personas que han estado buscando una oportunidad como la que este centro ofrece”. 

Las ganas de surgir y el emprendimiento de un grupo de mujeres, pertenecientes al ex Hogar Divina Providencia del Obispado de San Felipe, fueron los principales factores para que Codelco se hicieran cargo de esta iniciativa, a través de los proyectos Buen Vecino que postulan al Fondo de Inversión Social. Al respecto, Monseñor Contreras precisa que en este proyecto “nuestro compromiso es apoyar a las personas y a la organización y este proyecto está al alero de una opción preferencial de la Iglesia por los pobres. La mujer necesita ser apoyada, valorada y dignificada como lo mismo sus hijos. Por lo que nosotros queremos también apoyar para que esos hijos tengan un futuro mejor.” 

Entre 2006 y 2007, Codelco invirtió en este proyecto de helicicultura (crianza de caracoles de tierra) cerca de 30 millones de pesos para capacitar al grupo de mujeres, implementar una nave de crianza de caracoles y la construcción de un edificio con laboratorio y oficinas. 

Gracias a estos recursos las mujeres podrán criar y comercializar los productos que ya están elaborando en base a la baba del molusco -como crema y jabón-, con lo que se transforman en microempresarias, aportando al desarrollo local y mejorando su calidad de vida y condiciones de empleabilidad. 

“El involucrarse en el aspecto humano el involucrarse con estas mujeres y no quedarse sólo en entregar el dinero habla muy bien de lo que tiene que ver con un desarrollo humano”, señaló Manuel Rivera, alcalde de San Felipe, momentos antes de develar una placa con el nombre del Centro de Helicicultura Caracolas. 

El cultivo de caracoles y la comercialización de productos derivados permite al grupo de microempresarias tener una fuente de ingresos segura y que manejan de manera autónoma. “Hoy tenemos los conocimientos básicos para emprender un oficio de helicicultoras profesionales en la zona. Nos dimos cuenta que nunca es tarde para empezar y esperamos que no tampoco sea demasiado tarde para alcanzar el éxito”, señaló Marisol Fernández, presidenta del grupo de mujeres helicicultoras. Precisó que la concreción del centro no fue fácil y añadió que “las compañeras son mujeres esforzadas, aperradas y colaboradoras. Todas queremos tener una vida mejor para nosotros y nuestros hijos”. 

Al evento de inauguración del Centro de Helicicultura Caracolas asistió el gobernador de la Provincia de Los Andes, Benigno Retamal; el Concejo Municipal de Los Andes; la encargada del Proyecto de Helicicultura, Iris Morales; la directora del Hogar Divina Providencia del Obispado de San Felipe, Elisa Muñoz; el diputado Marco Antonio Núñez; así como también ejecutivos de Codelco, entre los que se encontraban Juan Manuel Saldivia, gerente corporativo de Sustentabilidad; Daniel Trivelli, gerente general de División Andina; Leonardo Cornejo, gerente de Sustentabilidad; el director de Gestión Comunitaria, Antonio Varas; y el encargado de Relaciones Comunitarias, Carlos Ríos. 

Niñas y jóvenes en riesgo social
Las mujeres que estarán a cargo del centro de Helicicultura Caracoles son madres de niñas o jóvenes en riesgo social que están acogidas en el ex Hogar Divina Providencia, institución sin fines de lucro dependiente del Obispado de San Felipe. Desde 1989 pertenece a la red de instituciones colaboradoras del Sename y es uno de los organismos acreditados ante este organismo del Estado chileno. 

En este lugar existe la modalidad de intervención de protección residencial orientando su quehacer bajo los principios éticos–políticos que establece la Convención de los Derechos de los Niños.