Una apretada agenda desarrollaron en hoy, jueves 20 de mayo, la delegación de Codelco en su primer día de visita a China. El Presidente Ejecutivo de la Corporación, Juan Villarzú, así como el presidente de la Federación de Trabajadores del Cobre, Raimundo Espinoza, acompañados por el vicepresidente corporativo de Comercialización, Roberto Souper y el encargado de Codelco Asia, Luis Miqueles, visitaron durante la jornada a dos de los más de treinta clientes que Codelco mantiene en este país.
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Los directores y ejecutivos de las empresas Tai-I Wire & Cable Plant y los de Walsine Wire & Cable Plants, especializados en la producción de alambres de cobre de distintos tipos, recibieron a la delegación para explicar y mostrar el funcionamiento de sus respectivas plantas.
Tai, compañía ubicada en la ciudad de Guanzhou de más de diez millones de habitantes, basa su mayor reputación y valor en la fabricación de alambres de hasta 0,04 milímetros de grosor (lo que equivale a menos de la mitad del grosor de un cabello humano), mientras que la firma Walsine, ubicada en la ciudad de Dongguan, también de más de diez millones de habitantes, desarrolla alambres de cobre altamente apreciada en el mercado de la alta tecnología.
En ambas empresas se manifestó a la delegación de Codelco el valor que le asignan a los cátodos de la Corporación que adquieren con regularidad. Si bien los volúmenes que estas dos compañías compran a Codelco no son tan significativos, en comparación a lo que produce la Corporación, para ellos los cátodos de Codelco son de vital importancia para su subsistencia y reputación.
Un ejemplo del prestigio y la alta demanda de la producción de Codelco es el interés y el énfasis con que los máximos ejecutivos de ambas plantas manifestaron a la delegación la necesidad de que se les garantizaran a futuro los volúmenes actuales de venta, e incluso señalaban que sus planes de expansión dependían en buena parte de que Codelco, en el futuro próximo, pudiera aumentar las toneladas que actualmente les vende.
Ambas plantas, ubicadas al sur de Cantón, funden los cátodos de alta pureza, los que luego los van pasando por una especie de prensa (parecida a una máquina para transformar la masa en fideos) hasta dejarlos de la dimensión por ellos requerida.
La limpieza y el orden al interior de las plantas, así como su nula emisión de gases o humos a la atmósfera, llamó la atención a los representantes nacionales, así como también los salarios que los operarios chinos reciben por su trabajo, el que oscila entre el equivalente a 60 dólares mensuales para los que recién se incorporan, hasta los 200 dólares para los que tienen más de cinco años de experiencia.
El mercado fundamental de estos dos productores es el interno chino, pero sus aspiraciones están puestas mucho más allá, abarcando no sólo Asia, sino que el mundo entero. Esa es la mentalidad de la nueva industria china, que tiene como horizonte conquistar los mercados mundiales y en el cual Codelco, por la calidad de sus cátodos, así como por su seriedad en el cumplimiento de sus compromisos comerciales, se ha transformado en pieza fundamental del desarrollo de este gran país asiático.
En los próximos días la delegación de Codelco, encabezada por el Presidente Ejecutivo y el presidente de la Federación de Trabajadores del Cobre, seguirá visitando a sus clientes dispersos a lo largo de China, para conocer así de primera mano, cuales son las necesidades que ellos manifiestan y también para transmitirles su experiencia en materia de organización y de relaciones con sus trabajadores, que la sitúa como una empresa líder a nivel mundial.