En búsqueda de desarrollo profesional, oportunidades, desafíos y crecimiento, Mauricio Montenegro se puso como meta algún día ingresar a trabajar a Codelco División El Teniente. “Finalmente lo logré. Ingresé el 1 de junio de 2020 y ya llevo tres años acá”, cuenta. “Había postulado un montón de veces y justo en plena pandemia, llegó mi oportunidad”.
¿De qué se trata tu trabajo?
Mi trabajo se trata de velar por el correcto funcionamiento de los equipos y maximizar lo que más se pueda la recuperación de agua. En esta área recibimos los relaves de las plantas y mediante la adición de floculantes (elementos que aglutinan los sólidos y los separan del agua) en los espesadores, recuperamos el agua para que sea una operación sustentable, disminuyendo el consumo de agua fresca y recirculando la que se ocupa.
Mi trabajo en sí es de terreno y también en la sala de control, organizamos las tareas con el operador experto del área, coordinamos los trabajos con las plantas de Molienda Convencional, Molienda SAG y también la de Tratamiento de Residuos.
En el terreno revisamos los equipos, para que estén funcionando de manera correcta: espesadores, bombas de floculantes, salas de bomba, cajones de distribución de cargas, entre otros.
¿Cómo llegaste a la División?
Yo era jefe de turno en División Andina, en una empresa colaboradora, y quería proyectarme más en lo profesional y en lo familiar. Cuando me llamaron que había quedado fue una emoción muy grande, le conté a todos y estaban contentos y orgullosos.
¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo?
Los desafíos que tenemos constantemente en la recuperación del agua, lo dinámico que es el día a día, porque somos una planta multivariable donde hay que estar atento a todo: sólidos, pH, disminuciones de carga, entonces tenemos que estar permanentemente pensando cómo mejorar los procesos.
¿Qué sientes que le ha entregado El Teniente a tu vida?
Desarrollo profesional, porque pude surgir desde mi puesto y también hay un tema de conciliación familiar, que para mí es lo más importante. Me gusta mucho estar acá también porque el ambiente laboral es demasiado grato, estoy muy contento y me proyecto aquí en El Teniente. Quiero traer a mi familia, establecerme en Rancagua.
¿Tiene algún significado para ti trabajar en una empresa como Codelco, que entrega sus excedentes a todos los chilenos y chilenas?
Sí, y es el orgullo de aportar al país con el trabajo que hacemos en esta división.