Cuando terminaba su formación en un liceo industrial, a Fernando González le ofrecieron hacer su práctica en el sector minero, pero dijo que no. “No me llamaba la atención”, dice. Incluso Fernando confiesa que, en ese tiempo, su pensamiento iba aún más allá. “Dije que nunca iba a trabajar en minería”, comenta riendo.
Hoy, ya son catorce años los que lleva en Codelco División El Teniente, donde ejerce como jefe de Turno de la Planta SAG, en el sector de Colón.
¿De qué se trata tu trabajo?
La tarea del jefe de Turno es bien intensa, porque tenemos varias plantas, dos moliendas, parte de flotación, el chancado de pebbles, más la planta auxiliar de chancado que también estamos a cargo. Analizamos indicadores, respondemos a las fallas que puede haber turno a turno y buscamos también innovaciones y mejoras continuas en los procesos.
Lo primero que hacemos al llegar, es la entrega de turno con el jefe del turno anterior, para saber si hubo anomalías y determinar soluciones, además de analizar datos, secuencias y tendencias del turno anterior, ver brechas, para luego analizarlas en los diálogos de desempeño que hacemos con el equipo.
El grupo al que lidero son diez personas más otra que está en el Centro Integrado de Operaciones (CIO), en Rancagua, más el eléctrico de turno. También tengo responsabilidad con el personal colaborador que está en la planta, entonces hablamos de unas ciento cincuenta personas en total.
¿Cuál es el principal desafío en tu trabajo?
El cuidado de las personas, que estén bien, motivarlos a que estén con energía día a día. Y eso no es fácil, porque todos tenemos problemas fuera del trabajo y es importante estar atentos a cómo llegan, cómo están y cómo se van, porque hay familias detrás.
Y también está la motivación diaria de seguir creciendo como profesional, ayudando al proceso, a la planta, a la División y la Corporación.
¿Qué mensaje de seguridad entregarías a las y los trabajadores de El Teniente?
Que es muy importante el rol que tenemos como líderes para motivar a las personas, porque los peligros en los procesos industriales siempre están y siempre hay familias detrás. Yo también tengo un hijo de siete años, una esposa, un papá, una mamá… entonces sufrir un accidente o que alguno de los trabajadores que, como líderes, tenemos a cargo es algo muy fuerte, porque acá somos todos una familia, un solo equipo.
¿Cuánto tiempo llevas en El Teniente?
Llegué en 2010 y, la verdad, fue súper divertido, porque yo dije que nunca iba a trabajar en minería. Salí de un liceo industrial en 2001, donde me ofrecieron hacer la práctica en la División y dije que no, porque no conocía la minería y no sabía de qué se trataba.
Después otras personas por ahí me ofrecían y les decía que no, que no me llamaba la atención. De ahí estudié ingeniería industrial, luego en 2009 quedé sin trabajo y justo me llamaron para trabajar en Codelco. Ahí ingresé a Sewell, partí como operador y en 2015 llegué al SAG, también como operador. Hice carrera y desde 2020 que ejerzo como jefe de Turno.
¿Qué sientes que le ha entregado El Teniente a tu vida?
Mucho. Me ha entregado conocimiento, valores. Conocí a gente que llevaba 35, 40 años trabajando y fui aprendiendo, adquiriendo los valores que tienen, aprender de su historia, sus logros y cómo llevaban eso a sus hijos.
Hoy, que mi hijo me diga que quiere ir a ver los distintos minerales conmigo, me emociona, porque le estoy entregando los valores de la minería y quiere aprender de esto. El “Feñita” tiene siete años y le gustan los minerales, los dinosaurios, la robótica, lee y adquiere esa información. Entonces ahí le digo hijo, yo solo rescato cobre, pero también hay molibdeno, oro, plata y quizás hay otros minerales en otros lugares de la mina a los que yo no ingreso, pero le interesa y gusta mucho el tema.
¿Qué significa para ti trabajar en Codelco, empresa que entrega sus excedentes a todos los chilenos y chilenas?
A mí me motiva venir acá a intentar maximizar lo que más pueda en recuperación de cobre, procesamiento, innovaciones, mejoras, para aportar con ese granito de arena y motivar a los equipos para que logremos todo lo que se entrega a través del cobre, el aporte al país, que es muy significativo y lo que aporta la División, con el esfuerzo que esto tiene, porque es sacrificado también, pero lo importante es aportar al país, a las familias, a las comunas.