La maquinaria reacondicionada con un motor eléctrico, está siendo utilizada en la recuperación de acero en la Molienda Convencional y apunta a impulsar la economía circular y fortalecer la sostenibilidad a la que se ha comprometido Codelco.
Como parte de sus avances hacia la innovación y la sostenibilidad, Codelco División El Teniente inició pruebas del primer mini cargador eléctrico en el proceso de recuperación de acero de la Molienda Convencional (MC), en la gerencia de Plantas, y que fortalece el objetivo de la empresa con la electromovilidad y la economía circular.
Hasta ahora para recuperar, reciclar y reutilizar el acero residual de la MC se empleaba una grúa y un minicargador de combustión interna. Para contribuir a la sostenibilidad del proceso, la compañía Andes Minerals, encargada de este servicio, comenzó la transición hacia equipos eléctricos con el uso de un minicargador reacondicionado con más de 10 mil horas de uso.
Roberto Videla, gerente general de esa empresa, destacó que “la recuperación de acero de molienda, scrap y mineral ya habla de sustentabilidad en sí misma, porque le damos una segunda vida al acero. A esto se suma que los equipos que usemos también sean no contaminantes. Al hacer la conversión de un equipo en desuso a eléctrico, también damos una segunda vida a la maquinaria”.
Esta iniciativa se suma a la creciente electrificación de El Teniente, que busca lograr el 100% de electromovilidad al 2030.
Hugo Olmos, superintendente de Planificación de Procesos Convencionales, de la Gerencia de Plantas de la División, destacó la importancia de estos proyectos. “Tienen una mirada desafiante con respecto a cuidar el medio ambiente, con una perspectiva de sustentabilidad.Este es un gran avance que hace una compañía chilena, y nosotros como Codelco, facilitamos que ellos puedan generar su prueba industrial”.
Este equipo fue desarrollado por la empresa ZeMaq. Su fundador, Vicente Bascuñán, planteó que el desarrollo del equipo reacondicionado de forma eléctrica ocurrió al ver que las máquinas Bobcat tenían muy buen desempeño, pero después de 10 o 12 años, podían pasar a desuso. “Nosotros tomamos una maquinaria en desuso, la revisamos y le cambiamos el motor. Eso es lo único diferente que tiene, el resto requiere la misma mantención que uno convencional”, detalló Bascuñán.
El minicargador eléctrico, actualmente en fase de pruebas, reemplazará al equipo de combustión interna en la realización de tareas críticas. Héctor Piña, jefe de unidad de la Molienda Convencional y administrador del contrato de Andes Minerals, subrayó la exigencia del entorno de prueba y la evaluación continua del rendimiento. «Estamos en una zona de alta exigencia para el equipo. Vamos a probarlo y ver si va cumpliendo los hitos que vamos definiendo y que sea parte del contrato».